De ayer a hoy

 

 ¿Cómo habrá visto el hombre un primer amanecer? ¿Qué habrá pensado? ¿Una lluvia? ¿De dónde caían esas gotas?...si arriba no hay nada.

Menos me puedo imaginar, ¿Cómo entender un volcán o un terremoto?

¿Cómo habrán sido los primeros partos?, ¿Los primeros alimentos?

Pasamos desde ese estado de inocencia total a hoy, que todo tiene o pretende tener una explicación racional.

Hoy nadie "muere por amor". Una persona con esa sensación se la diagnostica de depresión severa y con un cantidad de pastillas que regulan la química del cerebro se soluciona...y si no mejora se aumenta la dosis.

Hoy curamos desde la calvicie hasta un cancer. Clonamos bichos, congelamos óvulos, creamos carne sintética.

Hubo un tiempo en que tuvimos que aprender. En otro tiempo tuvimos que saber como transmitir lo aprendido y mantener el conocimiento.

Hoy no tengo que saber nada, porque lo puedo consultar todo en el momento. Y tampoco me preocupo ni de saber, ni de transmitir ni de mantener lo aprendido. ¿Para qué? Si todo está guardado en cientos de miles y más miles de computadoras.

Y eso está con resguardo de seguridades para casos extremos hasta de guerras nucleares.

Ah!, Si. Eso aún no lo solucionamos.

Si sos de otro color, te hago la guerra.

Si crees en otro Díos, te hago la guerra.

Si hablás otro idioma, te hago la guerra.

Si pensas distinto, te hago la guerra.

Ya no somos aquellos primitivos inocentes, ahora somos unos primitivos estúpidos y con capacidad de destrucción masiva.

Nos dedicamos a mejorar la apariencia, pero no el espíritu.

Cada uno elige.

Gracias por leer.

César G. Monteghirfo

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