Hacemos lo que nos animamos
Nadie hace lo que quiere, no importa ni tu genética, status social, educación, familia, sexo, altura... no importa nada. Nadie hace lo que quiere. En el mejor de los casos hacemos lo que podemos. Y la mayoría de las veces hacemos lo que nos animamos. Todos cargamos con diferentes traumas, frustraciones, inseguridades, miedos. Algunos pelean mejor sus luchas internas, pero igual no ganan siempre y otros ni siquiera luchan. A veces, son tantas las peleas perdidas que se vuelve "filosofía" no intentarlo: ¿Para qué si va a salir mal?, cuando lo cierto es que esa pregunta "aparece" luego de décadas de frustración. Por eso. Por el hecho de que todos peleamos contra nosotros y muchas veces perdemos. No debemos juzgar al otro, porque hacemos lo que hacemos, y cada hacer depende de una cantidad de circunstancias, algunas manejables y otras totalmente aleatorias y hasta parecen caprichosas. Hay algunas cosas seguras: 1 Mientras estemos vivos nos pasarán cosas. 2 la cuestión ...